Una tarjeta de crédito ofrece muchas ventajas a su propietario. Permite pagos sin efectivo en el extranjero o en Internet y, a menudo, también está equipado con servicios adicionales. Por ejemplo, hay tarjetas de crédito para ciertos grupos objetivo, como estudiantes, jóvenes, viajeros frecuentes o empresarios. Las condiciones y tarifas difieren mucho entre los numerosos proveedores. Algunos bancos también ofrecen la tarjeta de crédito de forma gratuita además de la cuenta corriente.
Numerosas instituciones financieras y empresas ofrecen tarjetas de crédito en estos días. Con la gran selección, es particularmente importante sopesar cuidadosamente las diferentes ofertas. Las tarjetas de crédito difieren por un lado en términos de facturación. Por ejemplo, hay tarjetas de crédito y tarjetas de crédito clásicas en las que el titular de la tarjeta recibe un préstamo real. Por otro lado, si el cliente paga con una tarjeta de débito, su cuenta será debitada inmediatamente después de la transacción. Con una tarjeta de prepago el crédito debe transferirse a la cuenta por adelantado. Solo entonces es posible un pago sin efectivo.
Una cuenta corriente es una cuenta bancaria que te permite administrar sus gastos en el día a día. Podrás domiciliar una nómina o establecer débitos directos y órdenes permanentes. Algunas cuentas corrientes pueden pagar intereses sobre el saldo, ofrecer reembolsos por gastos de mantenimiento u ofrecer otro tipo de ventajas o regalos.
Como su propio nombre indica, las cuentas de ahorro nos ofrecen cierta rentabilidad en relación con el dinero que ingresas.
Algunas cuentas de ahorro te exigen mantener el saldo durante un determinado periodo de tiempo, aunque otras te permitirán disponer tu dinero en el momento que quieras. En general, son una opción segura para obtener una rentabilidad de tus ahorros.
Es indispensable que domicilies tu nómina mensual para contratar este tipo de cuenta, en caso contrario no podrás abrirla.
La operativa y características muy similar a una cuenta corriente, aunque suelen ofrecen una serie de ventajas por la domiciliación de la nómina como regalos o la devolución de un porcentaje sobre los recibos domiciliados entre otros.
Pueden ofrecer alguna remuneración aunque no es habitual, pero siempre será inferior a la que ofrecen las cuentas de ahorro.
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